Es el complemento perfecto para la rutina de cuidados de la piel diaria. La textura del sérum tiene una textura más fluida que la de las cremas bálsamos y mascarillas y mayor concentración de activos por lo que penetra con mucho más facilidad hasta las capas más profundas de la piel para aportar la nutrición e hidratación necesaria de adentro hacia afuera.